Hace sis años que Bélgica autorizó para el consumo humano una lista de 10 insectos. Convencida de que sus compatriotas vencerán sus reticencias iniciales y acabarán por incluirlos en su gastronomía, Maite Mercier creó Litte Food, una granja de cría y producción de grillos que convierte en aperitivos o salsa para untar. Su plan más próximo es lanzar una hamburguesa de grillos que espera que tenga éxito en Europa. «Mientras estudiaba, me di cuenta de que teníamos un problema sanitario y ecológico en cuanto al consumo de carne. Entonces pensé en las algas y los insectos como alternativa», explica Mercier.
Pronto, 29 de enero de 2019